lunes, 19 de noviembre de 2012

Marketing Low Cost


Marketing, Imaginación y Creatividad.

Hay palabras que en tiempos de crisis se ponen de moda, las personas las pronuncian continuamente y sirven de apellido para casi todos los productos o negocios. Es el caso de la palabra low-cost, que significa: bajo coste. Desde hace unos años no paramos de ver como los negocios que ofrecen productos a bajo coste han proliferado. Así; surgieron: la moda low-cost, los viajes low-cost, los supermercados low-cost, los restaurantes low-cost... todos tienen un objetivo común: vender en épocas de crisis más productos utilizando como posicionamiento el ofrecer precios siempre bajos, buscando al cliente ávido, oportunista y ahorrador.

Pero esta nueva crisis ha afectado a casi todos los sectores y negocios que han tenido que reposicionarse, renovarse o quedarse a merced de los vientos, con el consabido inminente cierre del mismo. El mundo del marketing no podía ser menos y para estos menesteres se acuñó el término de Marketing low-cost, en este caso referido al marketing que hacen los emprendedores y las empresas con escasos recursos, y que permite a las Pymes llevar a cabo sus objetivos con mayor eficacia, con menores gastos y con una mayor rentabilización de sus recursos, tanto humanos como económicos

Lo que inicialmente era una buena estrategia para los que empezaban en el mundo empresarial y para las pequeñas empresas de ámbito más bien local, se ha convertido en una fórmula para hacer marketing válida para cualquier tipo de empresa; cada vez más multinacionales se suman a esta forma de actuar.

Pero el marketing low-cost es mucho más que hacer marketing invirtiendo poco dinero, es una forma de entender el marketing, una estrategia empresarial y una decidida apuesta por hacer las cosas de manera diferente a lo que hasta hace poco se venía haciendo. Los directores y responsables de marketing estamos viendo como los directores financieros recortan cada vez más nuestros presupuestos, recurrir a esta estrategia puede ser una muy buena opción para que nuestro departamento pueda seguir con una alta actividad a un coste moderado.

Cuando los presupuestos para promocionar nuestra empresa son muy pequeños, podemos tirar de la estrategia, del ingenio, la tecnología, la especialización, la sencillez y la creatividad para poner en marcha un plan de marketing low-cost. Siempre siendo pragmáticos y haciendo un marketing Tangible, alcanzando mayor eficacia con menor inversión, ese es el "leit motive".

Es el momento de que hagas tu Plan de Marketing low-cost. Puedes externalizar tu departamento de marketing con un proveedor, trabajar el posicionamiento de tu marca a través de las Redes Sociales, creando un blog, trabajando el Marketing de Contenidos, estableciendo campañas de co-marketing con otras marcas, realizando muchas acciones de Marketing de Guerrillas, trabajando el entorno más próximo, dándole visibilidad a tu empresa siempre que tengas una mínima opción, usando un lenguaje sencillo y contundente en tu publicidad y comunicación, implicando a tus clientes en tu empresa a través de acciones experienciales, cuidando tu reputación on-line, teniendo tu web siempre actualizada, especializándote, estando siempre en contacto con el cliente, creando redes y programas de fidelización...


Estas son solo algunas de las opciones que puedes adoptar para hacer tu plan de marketing a bajo coste, pero lo bueno de esto es que tu ingenio, tu creatividad y el conocimiento del sector en el que operas pueden aportar ideas que te diferencien de la competencia a un coste irrisorio.


viernes, 2 de noviembre de 2012

Marketing y los Sentidos

El Marketing de los Sentidos.

La inspiración puede estar en cualquier cosa, antes de empezar a escribir este nuevo episodio de marketing, tengo que confesar que las musas me visitaron tras ver por enésima vez esa obra maestra del cine que es “el imperio de los sentidos”; al término de la misma comencé a escribir estas lineas.

Me gusta sentarme en lugares públicos como paradas de autobús, estaciones de tren, centros comerciales, aeropuertos... y observar como el mundo se mueve a mi alrededor, como las personas y yo mismo recibimos impactos publicitarios en cada uno de esos espacios. Un cartel, una vaya, una cuña publicitaria, una pantalla, un mupi... infinidad de soportes que quieren comunicar, pero que rara vez estimulan a más de un sentido; y es de esto último de lo que quiero hablar en este post, de la importancia que tiene para el marketing el despertar los sentidos de los consumidores.

Es difícil encontrar campañas de publicidad o de marketing que intenten estimular más de dos sentidos a la vez, lo más común es que intenten entrar en nuestra mente a través de la combinación de la vista y el oído, dejando a un lado el resto de los sentidos. Si bien es cierto que los soportes nos limitan mucho, también es cierto que la creatividad humana no tiene límites y gracias a los avances tecnológicos que se han realizado tampoco tiene frenos.

Pongamos como ejemplo el siguiente caso, una compañía de perfumes lanza un nuevo producto al mercado, para ello contrata con una conocida revista de moda una página de publicidad; a parte del diseño gráfico, sus creativos deciden introducir el olor del perfume en dicha página, también un troquel con los mismos relieves que lleva el packaging del perfume; a su vez para redondear la faena deciden incorporar un código de lectura para teléfonos móviles donde automáticamente te puedes descargar el spot de presentación del producto (imágenes y sonidos). Esto que acabo de contar es un ejemplo de una campaña centrada en provocar recuerdos utilizando varios  sentidos, complementándose unas sensaciones con otras y evitando la exclusión de impactos.

Sigamos hablando de sentidos... Recientemente leía un estudio donde se hablaba del impacto y el recuerdo que provoca la percepción a través de cada uno de nuestros sentidos. De él quiero destacar dos datos que a buen seguro te harán reflexionar. El primero de ellos dice que lo que percibimos a través de la vista solo tiene un 3% de recuerdo, además la mayoría de los impactos que recibimos diariamente nos llegan a través de este sentido, con lo cual la competencia con otros mensajes es mucho mayor. El otro dato que extraigo de dicho estudio es relativo al olfato, lo que percibimos a través de este sentido tiene un recuerdo de más del 30%, lo cual nos deja claro la importancia que tienen el resto de los sentidos.

Todos recordamos el olor a palomitas que hay en los cines, cuando entramos en ellos ese olor provoca ganas de comprar el producto; también el olor a gofres que hay en las calles donde existen lugares de venta de este producto, el ambientador de algunas tiendas... todos son olores que quedan impresos en nuestra mente, algunos de ellos desde niños y hacen que se despierten emociones y sensaciones de alto interés para el marketing.

Los que hacemos Marketing Tangible, ya no entendemos el marketing sin estimular múltiples sentidos; sabemos que es fundamental llegar por diferentes caminos a la mente de los consumidores para dejar huellas imborrables y ser la primera opción en sus mentes. El marketing es como el sexo, sino pones todos tus sentidos en ello, si no estimulas debidamente será muy complicado que obtengas los resultados deseados y nunca alcanzarás los objetivos.

Por eso, me pregunto:¿Por qué sigues haciendo marketing para uno o dos sentidos?